Segunda derrota

Pensaba hacer una crónica del partido, pero he llegado tan quemado con la actuación arbitral de los últimos minutos que no me apetece escribir nada, así que os dejo el enlace al artículo de El Norte de Castilla, cambiando algunas cosas que no estaban bien y añadiendo algunas otras:

http://www.nortecastilla.es/20070929/deportes_palencia/baloncesto/misma-agonia-identico-final-20070929.html

La misma agonía, idéntico final
Alimentos de Palencia volvió a caer en la Liga en el último minuto del partido

ALIMENTOS DE PALENCIA 79 - FARHO GIJÓN 82
Alimentos de Palencia: Berry (7), Javi Pérez (6), Santana (17), Stanton (11) y Maio (24) -Cinco inicial-. También jugaron Bouldin (9), Juanpe (-) y Coelho (5).

Farho Gijón: Kiefer (16), Herepey (2), Alonso (4), Gunnarsson (6) y Wolf (20) -Cinco inicial-. También jugaron Rajniak (12), Pineda (11), Vázquez (5), Kieser (-) y Suárez (6).

Parciales: 23-17, 35-38, 60-65 y 79-82.

Árbitros: González Zumajo y Benítez Rodríguez.

Incidencias: Partido de la Liga disputado en el Pabellón Municipal Marta Domínguez de Palencia. Excluyeron por faltas personales a Maio, por parte de Alimentos de Palencia.


Se repite la historia. Alimentos de Palencia vuelve a perder el partido en los últimos instantes. Lo mismo que le pasó a los palentinos en el primer encuentro de Liga en Cáceres, le volvió a ocurrir en el que ayer disputó contra el Farho Gijón.

Alimentos de Palencia tuvo ayer otro partido más parecido a un encuentro decisivo de 'play off' que a un partido de la Liga. La única diferencia entre el choque de ayer y el de la semana pasada es que en el encuentro contra Farho, los palentinos tuvieron en sus manos, concretamente en las de Santana, un final diferente. El dominicano se la jugó de tres cuando quedaban 58 segundos para el final, cuando había un empate a 79 en el marcador.

De esa jugada derivaron unos tiros libres en favor de los asturianos que hicieron crecer la distancia en el electrónico, pero también disminuir el tiempo en el cronómetro para que Alimentos pudiera reaccionar. Pero por partes.

Comienzo flojo

Alimentos de Palencia comenzó muy flojo el partido ante el Farho Gijón, sobre todo de cara al aro. Sin embargo, los asturianos que visitaron Palencia como líderes, tampoco desplegaron un gran juego, pero tuvieron más acierto, lo que provocó que el primer parcial quedara en el 23-17.

El segundo cuarto fue desastroso. Alimentos de Palencia no levantaba la cabeza y el letargo fue asumido también por el rival, que únicamente reaccionaba con algún contraataque ágil contra la canasta de los palentinos.

El descanso les vino bien a los dos conjuntos. Alimentos de Palencia y Farho Gijón se desentendieron de la galbana que les mantenía sumidos en el cuarto anterior, y comenzaron a ver el final del partido, que prometía igualdad e intensidad. Y así fue.

Con 60-65 a favor de los asturianos comenzó el último cuarto. Alimentos de Palencia le echó más corazón pero Farho, más cabeza y eficacia. Cuando los asturianos se marchaban en el marcador, llegó la heróica de los palentinos, arropados por una afición que ayer mereció de su equipo mejor premio. Bouldin consiguió empatar el partido a 79 puntos cuando quedaba menos de un minuto para el final. Con la posesión favoreciendo a los palentinos, Bouldin se jugó un triple sin agotar la posesión que terminaría por pasar factura. La acción conllevó una falta cuando quedaban 28 segundos de la que el equipo asturiano sólo aprovechó uno de los dos tiros libres, dejando la siguiente posesión para el Alimentos de Palencia que se jugó un triple a manos de Stanton a falta de menos de 10 segundos, que no entró. El rebote acabó en lucha, que esta vez beneficiaba al Farho Gijón. A partir de ahí dos faltas antideportivas y los consiguientes tiros libres y posesión a favor de los asturianos. Cada vez que Farho sacaba, Alimentos provocaba una personal que los árbitros convertían en antideportiva.

Así se agotaron los últimos 5 segundos que dejaron el marcador final del partido en 79-82 y a los palentinos con la impotencia de volver a protagonizar una derrota así, esta vez en su casa.